| Foto:  https://es.wikipedia.org/   RAFAEL GOCHEZ SOSA ( El Salvador )   Rafael Góchez  Sosa (Santa Tecla, 23 de diciembre de 1927 – 16 de  diciembre de 1986) fue un poeta y docente salvadoreño.  En su juventud Góchez logró ser titulado como contador, y fungió además  como maestro de educación media en la especialidad de estética y letras. A  finales de la década de los años 1940 partió a Honduras a trabajar en las bananeras de este país, como un trabajador más.  De regreso a El Salvador se dedicó a la docencia y al periodismo, además de  contraer nupcias en 1957. El siguiente año fundó el Liceo Tecleño.  Su primer  éxito en el ámbito poético fue en los Juegos florales de Sonsonate en 1959, formando parte en ese tiempo de la llamada  “Generación comprometida”. Ganó otros concursos, entre ellos los Juegos  florales de Quezaltenango con los trabajos Desde la Sombra y Los  Regresos en 1967 y 1970, respectivamente. Otro de sus logros fue el haber ganado la II Bienal  Latinoamericana de poesía en Panamá en 1972.  Obra:  Luna nueva, poesía, San Salvador, 1962; Poemas circulares, poesía, San  Salvador, 1964; Voces del silencio, poesía, San  Salvador, 1967; Poemas para leer sin música;   poesía, México, 1971; Cien años de poesía salvadoreña: 1800-1900 con Tirso Canales, crítica histórico–literaria, San Salvador, 1978.Biografia extraída de https://es.wikipedia.org/
   TEXTO EN ESPAÑOL  -   TEXTO EM PORTUGUÊS   POESÍA  CONTEMPORÁNEA DE AMÉRICA LATINA. Org. Jorge Boccanera; Saúl Ibargoyen.          México, DF: Editores  Mexicanos Unidos, 1998.  260  p.  Inclui poetas brasileiros.Ex. bibl. Antonio  Miranda, doação do livreiro José Jorge Leite de Brito.
   NUEVAS FORMAS DE LA NUEVA VOZ
 Ya
 no puedo decir que un río de espinas
 cruza la noche
 y
 desemboca
 en
 mi
 alma
 
 Hoy
 digo
 que
 el dolor del mundo
 me desvela.
 Hace de mi reloj un reclamo constante,
 una espada en llamas
 contra los  crepúsculos.
 
 Porque el hombre cambia.  Es ley de  sudores
 afanes
 y esperanzas
 El niño es niño.
 Sueña
 con ángeles que lo transportaron hasta el centro
 del polen, hasta el borde del lucero más grande.
 Y ese niño, ya hombre, sabe
 que no hay ángeles.
 Y el polen causa estornudos.
 Y un lucero
 puede acabar con el mundo.
 Y
 hoy se llora de otro modo.
 Y las lágrimas no afloran.
 Y
 la madre está lejos.
 
 Así, pues, ya no puedo decir que la piedra
 es el calor de un viento que empieza en la tristeza
 y termina en el canto frío del camino.
 
 Hoy digo: la piedra es el arma última
 para  defendernos.
 
 
 TEXTO EM PORTUGUÊSTradução de ANTONIO MIRANDA
   Jánão posso dizer que um rio de espinhas
 cruza a noite
 e
 desemboca
 em
 minha
 alma
 
 Hojedigo
 que
 al dor do mundo
 me revela.
 Faz de meu relógio uma reclamação constante,
 uma espada em chamas
 contra os  crepúsculos.
 
 Porque  o homem muda.  É lei de suores
 esforços
 e esperanças
 O menino é um menino.
 Sonha
 com anjos que o transportaram até o centro
 de pólem, até a borda da estrela maior.
 E esse menino, já homem, sabe
 que não existem anjos.
 E o pólem causa espirros.
 E uma estrela
 pode acabar com o mundo.
 E
 agora se chora de outra maneira.
 E as lágrimas não afloram.
 E
 a mãe está longe
 Assim, portanto, já não posso dizer que a pedraé o calor de um vento que começa na tristeza
 e termina no canto frio do caminho.
 
 Agora digo: a pedra é a última arma
 para  defender-nos.
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 http://www.antoniomiranda.com.br/Iberoamerica/el_salvador/el_salvador.html    Página publicada em  fevereiro de 2022 
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